viernes, 29 de abril de 2011

Una boda para cabreados.

La boda, para cabreados
Por: Delia Rodríguez

Tiene mucho de inmoral que el mismo día que se rozan los cinco millones de parados en España andemos todos pendientes de una boda. Pero no es más ofensivo que el hecho de que llevemos días, semanas (¿años?) con el fútbol reinando en lo más visto de los medios y lo más hablado en las redes. Cuanto peor nos van las cosas, más necesitamos un Mourinho expiatorio o una cenicienta Kate.

Esta es una pequeña lista de imprescindibles si estás siguiendo la boda... pero cabreado. Que como bien sabemos las que nos tragamos películas de miedo enteritas con el cuello girado diciendo no-quiero-verlo, una cosa no quita la otra.

1. El botón de The Guardian. En un brillante ejercicio de sí-pero-no, el diario británico ha colocado un botoncito en su portada con la leyenda "republicanos pinchad aquí" y que sirve para ocultar todas las informaciones sobre el enlace (exacto, como la extensión de Firefox anti-Bieber). A todo el mundo le ha hecho mucha gracia el ejercicio de humor inglés -especialmente a los periodistas, que lo hemos celebrado en Twitter- pero lo cierto es que ni The Guardian ni ningún otro medio se ha atrevido a obviar un acontecimiento de los que te arreglan las audiencias del mes.

Han completado su tímida rebelión con un blog que retransmite en vivo lo que ocurre en el mundo real fuera del enlace. Al otro lado del océano, el ciclotímico Huffington también ha publicado una guía para bloquear los contenidos sobre la boda en las redes sociales mientras se entregaban al asunto.

2. El vídeo de la otra boda. Es un anuncio de T-Mobile en el que aparecen un montón de dobles de la familia real. Espectacular la entrada del príncipe Harry que, contra todo pronóstico, no ha hecho un Hannover. El vídeo lleva 14 millones de visitas en 14 días y es un guiño a ese subgénero de YouTube en el que los invitados/novios se dedican a cantar/bailar antes/durante el enlace de manera más/menos ridícula.


3. Si siempre te has preguntado qué opina un químico sobre el zafiro del anillo de compromiso de la Middleton, internet está ahí para responderte y que puedas seguir adelante con tu vida creyendo que sabes un poco más de ciencia que antes.

4. El clásico recopilatorio con diez canciones antimonárquicas. Aparecen los Smiths de Morrissey, que por cierto, ha dicho hace poco en la BBC que la familia real es una panda de parásitos.

5. Todos nos hemos preguntado alguna vez quién es el friki que está esperando a que alguien muera o se case con el dedo puesto en "actualizar Wikipedia". Bien, pues tenemos la respuesta. Es el propio fundador de la Wikipedia, Jimmy Wales, quien ha actualizado la información sobre Kate Middleton.

6. El mundo se divide entre los que opinan que el vestido de Kate se parece al de Grace Kelly y los que opinan que se parece al de Belén Esteban. Bueno, en realidad El Mundo dice que a Belén y el ABC que a Grace. Aquí dejo la galería de una en el Hola y la de la otra en Life para que cada uno juzgue. (Bonus: lo que piensa Carmen Lomana).

7. La prematura decadencia física del príncipe Guillermo es un asunto de estado que entusiasma por igual a grandes medios y chicas que han pegado en la carpeta fotos de su hermano el gamberro encima de las suyas. La alopecia del príncipe ha sido tratada de forma muy seria por la agencia AP o The New York Times, por ejemplo. Para más documentación sobre calvos reales, lo mejor es pasar por aquí.

8. La revista Wired ha hecho un esfuerzo por explicar a sus lectores geeks qué es una boda real. En un tuit muy celebrado, les ha enseñado que se trata más o menos de esto:



9. La princesa Beatrice (para los malos fisonomistas, hija de Sarah Ferguson), posee un excelente gusto para los sombreros y tocados del que ya ha hecho gala en anteriores ocasiones. Esta galería fotográfica es una magnífica excusa para entablar una amigable charla sobre la Revolución Francesa.



10. Twitter ha el lugar de encuentro para los que han seguido cabreados el enlace. Ha sido un placer. Culpable, pero un placer.

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